Era anciano mi abuelo cuando falleció de vivir .
Tenía cien años y tomaba café todos los días .
Era flaco como un palo ,
sus piernas como enormes zancos hacia el cielo ,
y una tarde canto su última canción .
Yo lo amaba con devoción ,
cuando perdió el equilibrio .
Yo también tomo café todos los días ,
y tengo los dientes como granos de maíz .